Sara Blonde sale del armario y pilla al hermanastro masturbándose

Cada vez que Sara Blonde escuchaba la cama del hermanastro golpeando contra la pared, sabía que se estaba masturbando y se tocaba imaginándoselo. Todos los días lo hacía a la misma hora, así que aquella tarde, la zorra se escondió en el armario y, cuando el chaval estaba en medio de la paja, abrió la puerta y se le paró enfrente vestida con una lencería transparente que le pondría la polla como una piedra a cualquier hombre. Él no lo necesitaba, ya que ya tenía el rabo bien duro, así que solo tuvo que dejar que la tetona se pusiera a chupársela y se sentara encima para cabalgarla hasta el orgasmo.