Los rumores de que mi tía Katie era ninfómana eran ciertos y lo comprobé
Tuve que hacerlo, no podía creer que esa adorable mujer que me daba regalos en mi cumpleaños y que siempre visitaba a mi madre para tomar el té era toda una puta sin límites, curiosamente mis tíos fueron quienes se encargaron de esparcir esos rumores que llegaron a mis oídos cuando yo ya era joven y la masturbación era parte de mi día a día, además de follar duro a mi novia, pero esa curiosidad por saber si las habladurías de que mi tía tetona Katie Cummings era ninfómana no me dejaban dormir por las noches, así que finalmente tuve esa oportunidad de oro de coger con ella, de hecho pensé que me daría una cachetada al proponerle un día de placer, su respuesta fue en seguida positiva y con una actitud muy sensual se entregó a mí, sus tetas me encandilaron, mi polla se puso como un cañón y tras una buena mamada la cogí como loco, su experiencia era notoria, vaya culo por dios!, casi me destroza las bolas de tanto montarme.