Le metieron una enorme polla negra a Ginebra Bellucci en hostal para turistas

Tras un año de arduo trabajo follando con decenas de chavales, Ginebra Bellucci se fue de vacaciones solo con lo necesario, sin un destino fijo, se hospedó en un hostal barato donde todo parecía aburrido, la guarra no se había percatado que en la parte superior de la litera se encontraba otro mochilero solitario, en seguida se le humedeció el coño, pero para no parecer una zorra barata se contuvo, hasta que el chaval fue a la ducha, Ginebra no pudo más y espió al cabrón mirándole el pollón colgando entre sus piernas y se hizo una pajita, esos calentones que tiene Ginebra ella no los puede controlar, le gusta tanto la polla que si os fijáis pasó de estar aburrida a estar lista para entregar el coño y así pasó, nadie se puede resistir a este pedazo de mujer culona y viciosa, el chaval se dio cuenta que la puta violaba su privacidad y sacó su polla para que lo masturbe, la guarra estaba con ese chochazo peludo por no tener tiempo para depilarse, pero al chaval no le importó y se la folló, mirar lo feliz y radiante que se ve la guarra cuando el tío está a punto de correrse en toda su cara.